La construcción en la antigüedad se inició debido a la necesidad que tenían los seres humanos de crear un refugio en el cual pudieran estar cómodos y moderar los efectos del clima como el frio invierno, esto permitió que el hombre se adaptara con mayor facilidad a los cambios que existían durante todas las estaciones del año.
En la edad de piedra aunque las primeras construcciones eran sencillas, se fabricaban de palos, piedras y vegetación que existía en el lugar.
La construcción más antigua de la que se tiene registro está ubicada en Turquía, Göbekli Tepe, de 11,000 años de antigüedad, de hecho, la primera pieza de arquitectura del mundo.
La construcción comenzó a evolucionar y las obras arquitectónicas se hicieron más complejas, se utilizaban principalmente piedras calizas que extraían de canteras aledañas, el hombre necesitaba materiales que pudieran satisfacer las necesidades que se presentaban en la edificación, es así que nacieron los primeros morteros los cuales se fabricaban con cal o adobe.