La humedad, el moho y el salitre son factores que pueden minar silenciosamente la calidad de vida en tu hogar. Estos problemas no solo son desagradables estéticamente, sino que también pueden tener graves repercusiones en tu salud y en la de tus seres queridos.
Moho: Cuando la humedad se acumula en espacios mal ventilados, como baños y sótanos, se crea un ambiente propicio para el crecimiento del moho. La exposición prolongada al moho puede desencadenar una serie de problemas de salud, desde alergias e irritación en las vías respiratorias hasta agravar condiciones preexistentes como el asma.
Humedad: La humedad constante en el hogar puede deteriorar la calidad del aire interior. Esto puede conducir a problemas de salud como alergias, congestión nasal y tos crónica, especialmente en personas con sistemas inmunológicos sensibles.
Salitre: La presencia de salitre en las paredes y superficies puede ser un indicativo de problemas de humedad subyacentes. Además de dañar las estructuras, el salitre puede liberar partículas tóxicas en el aire que, cuando se inhalan a lo largo del tiempo, pueden afectar la salud pulmonar y provocar irritación en los ojos y la piel.